La Agenda global de Gobiernos Locales y Regionales

¿Qué es la Agenda Global?

Los gobiernos locales y regionales demuestran día a día el potencial que tiene la acción basada en la proximidad para contribuir a la resolución de los grandes retos globales. Por ello, CGLU considera que el desarrollo y la mejora de las condiciones de vida de las personas debe llevarse a cabo principalmente a nivel local.  Nos esforzamos por lograr la descentralización como una forma de democratizar la gobernanza pública a todos los niveles.

Ciudades y Gobiernos Locales Unidos es la voz de los gobiernos locales y regionales de todo el mundo. Nuestro objetivo es asegurar que nuestros valores sean compartidos entre nuestros miembros, y esta fuerza es el motor de nuestro objetivo de asegurar un puesto más permanente en la mesa global, para asegurar que las perspectivas locales y los puntos de vista de los gobiernos locales y regionales jueguen un papel en los procesos de toma de decisiones globales, y en la implementación sobre el terreno de las agendas globales.

                                                                                                                                                                 

Nuestra organización también está totalmente comprometida con la plena realización y renovación de la democracia local, para poder empoderar a los gobiernos locales y regionales para que desempeñen su papel en el futuro de la humanidad. Sólo si dotamos a los gobiernos locales de los poderes y recursos necesarios -humanos y financieros- podremos garantizar que los servicios básicos que prestan -como el acceso a la vivienda, los servicios básicos y los derechos humanos- se lleven a cabo plenamente.

Una red comprometida con el logro de los Objetivos Globales

Las principales agendas globales de desarrollo sólo pueden lograrse si se integran en todas las actividades de planificación, formulación de políticas y acción. Las soluciones globales deben basarse en estas experiencias y enfoques locales para asegurar un futuro para nuestras comunidades. Esto es a lo que llamamos localización: el logro de las agendas globales desde abajo hacia arriba. La única manera de lograr el Acuerdo de París es a través de la consecución de los ODS, lo que sólo será posible a través del potencial de aceleración de la Nueva Agenda Urbana.

                                                                                                                                                                  

La democracia local, el liderazgo local y la provisión de servicios locales son herramientas vitales para impulsar el desarrollo de manera que se arraigue en las realidades culturales, sociales, ambientales y económicas de cada territorio. Es por eso que CGLU aboga por un mayor papel de los gobiernos locales y regionales en el desarrollo de políticas internacionales, la implementación y la presentación de informes para localizar los objetivos globales.

La próxima frontera del movimiento municipal

La Agenda 2030 representa una oportunidad para renovar el contrato social, para repensar las relaciones mientras entramos en la llamada década de la implementación. Nuestro movimiento ha trabajado para apropiarse de esta agenda a través de la localización, lo que permite a la circunscripción innovar y nos coloca en el centro de la política de desarrollo internacional, y es la única garantía para su cumplimiento.

El movimiento municipal internacional tiene en sus manos una tarea inmensa, pero que superaremos si nos apegamos a nuestros orígenes como movimiento que protege y fomenta la democracia local, siendo fieles a nuestros valores y principios de descentralización, subsidiariedad y rendición de cuentas.

                                                                                                                                                                 

La próxima frontera del movimiento municipal trabajará para desarrollar diálogos intergeneracionales para asegurar la paz, por construir una verdadera transición ecológica cambiando nuestros patrones de producción y consumo y será guardián de la democracia local y de los sueños de nuestras comunidades.

Nuestra próxima frontera se esforzará por construir comunidades resilientes mediante la promoción de nuestro papel en la gestión de los recursos naturales, garantizará que se escuchen las voces de las mujeres y las niñas en la creación del proceso de localización, situará la igualdad de género en el centro de los procesos de desarrollo y dará la máxima importancia a la cultura como el cuarto pilar del desarrollo.